Estos apetitosos rollitos de espinacas y champiñones son ideales como aperitivo para cualquier ocasión. Se pueden preparar con un día de antelación y calentar un poco antes de servir.
Disolver la levadura fresca en la leche. En un tazón de tamaño mediano mezclar bien la mantequilla con la harina y la sal. Añadir los huevos y la leche con levadura y mezclar hasta que estén bien integrados. Amasar bien, cubrir con plástico y refrigerar durante aproximadamente 1 hora para permitir que la levadura se desarrolle.
Prepara el relleno de espinacas.
En una cacerola, ponga agua a hervir, espere hasta que el agua esté hirviendo a borbotones, agregue espinacas frescas y cocine durante 3 minutos, luego escurra inmediatamente.
Dejar enfriar. Cuando esté lo suficientemente frío, cortar un poco en trozos más pequeños.
En una sartén grande de fondo plano, calienta el aceite a fuego medio-alto. Cocina la cebolla y el ajo durante unos 5 minutos hasta que estén suaves. Agrega los champiñones y las espinacas y cocina hasta que cualquier líquido se haya evaporado. Agrega sal y pimienta y retira del fuego y deja enfriar.
Precalienta el horno a 180 (350F).
Cómo dar forma a los molinetes.
Corta la masa en 3 piezas iguales. Espolvorea harina sobre la superficie de trabajo. Usando un rodillo, extiende cada pieza en un rectángulo de aproximadamente 12 pulgadas (30 cm) de largo, 10 de alto.
Cubre la masa con 1/3 del relleno de espinacas. Enrolla y corta en rodajas de 1 pulgada. Coloca las piezas de masa en una bandeja para hornear. Pincela con yema de huevo.
Hornea durante unos 25-30 minutos o hasta que esté bien dorado.